El nacimiento del cono de helado: una crisis creativa

La historia del cono de helado es un claro ejemplo de cómo una situación inesperada puede convertirse en una oportunidad de éxito. En 1904, en la Feria Mundial de St. Louis, un vendedor de helados se quedó sin vasos para servir su producto. Parecía un desastre, una crisis que lo obligaba a cerrar su puesto.

Pero en vez de rendirse, la situación lo forzó a pensar de manera diferente. Justo a su lado, un vendedor de waffles llamado Ernest A. Hamwi, le sugirió una solución simple: usar sus delgados y crujientes waffles como recipiente. Así, enrollaron uno de los waffles, le pusieron una bola de helado y crearon un invento que revolucionó la forma de consumir este postre.

Este relato nos enseña que los problemas a veces son solo el catalizador para encontrar soluciones mejores y más ingeniosas. Lo que parece un obstáculo insuperable puede ser, en realidad, una oportunidad para innovar y prosperar.